lunes, 23 de junio de 2014

UNA FORMA DE TRABAJAR LOS ANIMALES

MI MASCOTA

Hoy quería compartir con vosotros una actividad que he hecho en mi clase y que nos ha dado mucho juego. Aprovechando el tema de los animales en conocimiento del medio, preparé este "trabajo" con el fin de que fuera más atractivo y el aprendizaje más significativo aún.
En primero se trabaja el conocimiento de animales doméstico y salvajes, y aprendemos cómo son, qué alimentos toman, dónde viven, cómo nacen...cosas muy sencillas pero esenciales para comenzar a construir el conocimiento de esta parte de nuestro entorno.
A mí personalmente me encantan los animales, y por eso se me ocurrió hacer esta actividad sobre las mascotas. Quien más y quien menos tiene una mascota en casa o algún familiar y sin tampoco se da el caso, me imagino una que me gustaría tener. En base a esa mascota, realizamos lo siguiente.

Tomamos una cartulina y pegamos fotos con nuestra mascota. Puede salir la mascota sola o con nosotros y en el caso de no tener ninguna, la dibujamos y ponemos nombre. 
Cómo veis yo he puesto a mis tres mascotas, a cada cual más bonita.

Por la parte de atrás, tendremos una ficha que rellenaremos con los datos de nuestra mascota.



No se aprecia muy bien lo que hay que rellenar, así que os lo pongo por aquí.

1. Nombre, edad y color de la mascota.
2. ¿Es ovíparo o vivíparo? ¿Por qué?
3. ¿Es herbívoro, carnívoro u omnívoro? ¿Por qué?
4. Escribe tres cosas que te guste hacer con tu mascota.
5. Investiga: ¿cómo se llama el médico de los animales?
6. Jamás debe abandonarse a un animal, ¿por qúé?

Una vez que rellenamos nuestra ficha, la presentamos en clase y la exponemos. Coincidiendo con el niño que ese día era el "responsable", también nos mostraba su trabajo y nos lo contaba. De esta manera, he aprovechado una actividad muy sencilla, en la que se sienten seguros, para que salgan a hablar en público. Creo que hay que empezar cuanto antes a hacer esto para ir rompiendo con ese miedo y que a mi parecer, es muy necesario. Hay que ir allanando el terreno, invitarles a salir a contarnos su trabajo de forma natural, para que después, cuando sean más mayores, no les sea tan costoso.

Pena que no tenga los trabajos de los niños (ya se los han llevado a casa) porque se esforzaron mucho y mostraron mucho entusiasmo. Muchos de ellos tienen pueblo, y eso ha ampliado el tipo de animales que hemos aprendido. Además, este tema también me ha facilitado trabajar con los niños el respeto hacia los animales. Frenar el maltrato a las distintas especies se hace desde abajo, desde los primeros momentos de su vida, y entre todos hemos debatido lo importante que es cuidar de nuestras mascotas durante toda su vida y por qué no se les puede abandonar ni hacer daños. Ha sido un tema magnífico, cargado no solo de contenido, sino también de valores y actitudes.


lunes, 16 de junio de 2014

MATERIAL DE ORIENTACIÓN ESPACIAL DEL OTOÑO

MATERIAL PARA TRABAJAR LA ORIENTACIÓN ESPACIAL

Rebuscando entre mis cajas para hacer limpieza por finalizar el curso, encontré este material que elaboré cuando estuve trabajando en un centro de educación especial. Los niños con los que trabajaba estaban bastante afectados cognitivamente, por tanto, era necesario que les presentara actividades tangibles y manipulables si quería acercarles a los aprendizajes. 

En ese momento estaba trabajando los conceptos sencillos de: arriba, abajo, al lado, cerca lejos, y para los más adelantados, izquierda y derecha. Aprovechando también que nos encontrábamos en la estación de otoño, relacioné los dibujos con el vocabulario de esta época para trabajarlo con ellos.





Como veis es muy sencillo de hacer. Simplemente os podéis descargar una imagen del otoño por internet (yo lo hice así) y después lo complementáis con otras imágenes que se puedan quitar y poner. Yo descargué un niño, nubes con lluvia, unas hojas, una nube soplando y una  ardilla. Con estos poquitos objetos, pude trabajar los conceptos espaciales de forma muy sencilla, ya que los íbamos colocando en el lugar correcto a la vez que decíamos donde estaban situados. También me daba juego para hacerles diferente preguntas sobre donde estaban colocados para que ellos me respondieran, o yo incluso se lo podía colocar mal para que dieran cuenta de mi error y pudieran rectificarlos. Mientras estamos jugando a confeccionar nuestro paisaje, no dejamos de hablar sobre lo que hacemos para así, recordar el vocabulario y expresar sencillas oraciones, por ejemplo, "el niño está al lado del árbol", "las nubes están arriba", "la ardilla está a la izquierda", "hay tres hojas amarillas", "el viento sopla fuerte"...

Si alguno sois profes de infantil o tenéis niños pequeñitos podéis hacerlo también, ya que les resultará una actividad atractiva y sencilla de hacer. No hay que olvidar que esta actividad también es buena para trabajar la motricidad fina, al tener que coger los dibujos con los dedos, pegarlos y despegarlos del velcro.

Espero que os haya gustado, y hasta la próxima


lunes, 9 de junio de 2014

MI TERMÓMETRO EMOCIONAL

TERMÓMETRO PARA MEDIR EMOCIONES

Si buscáis por internet podéis encontrar muchas variables de lo que es un termómetro emocional y cómo poder usarlo. Gracias a blogs educativos y páginas de este tipo yo también lo descubrí y lo moldeé a mi gusto y hacia las necesidades de mis alumnos. Por eso, quería presentaros en esta entrada el material que yo he hecho y cómo lo he aplicado.

Para comenzar, quiero comentar que lo he trabajado con una alumna que cursa 5º de primaria, que tiene muchas dificultades par controlar su estado de ánimo a la hora de hacer las tareas escolares. Se enfada con mucha frecuencia, llegando a niveles tan altos, que se hace muy difícil tener una tarde en casa armoniosa. Fácil es darse cuenta de las consecuencias tan nefastas que estos hechos traen consigo en la relación de padres-hijos. Por eso es importante, por un lado, dar pautas a los padres para prevenir y actuar cuando la situación se desencadena, y por otro, trabajar con el alumno sus emociones.


Previamente ya habíamos trabajado a través de otras actividades, la detección de situación de situaciones que me ponen nerviosa, me molestan, me desagradan, me enrabietan....y estuvimos analizando cómo me sentía en cada una de ellas, y qué signos experimento en mi cuerpo para darme cuenta de cómo me siento así (siento calor, me pongo tensa, respiro más fuerte, tengo ganas de llorar...). Una vez visto esto, le hice el termómetro que aparece en la foto. Como veis está dividido en distintas emociones que parten de emociones positivas (hacia la cual debemos tender), y una graduación cada vez más intensa de emociones negativas. 

Esta alumna tiene apoyo de sus padres para realizar las tareas, y es con ellos con los que muestra principalmente las explosiones de enfado. Por este motivo, el material lo utilizamos en este momento y de la siguiente manera.

Junto con el termómetro hay una pequeña tortuga que se utiliza para indicar el estado emocional en el que me encuentro. Un requisito imprescindible, es que cuando comience las tareas, la tortuga debe estar en la franja de "bien, tranquila". Hay que arrancar el momento de estudio de forma positiva (habremos leído una frase del "cofre de las palabras mágicas"), y aceptando gustosamente el apoyo de sus padres. A medida que van trabajando, ella va a poder comunicar a través del lenguaje oral y del termómetro qué situaciones han provocado un cambio en su estado emocional, para que de esa manera por un lado, los papás puedan conocer qué cosas hay que evitar, y ella a su vez, sea capaz de transmitir lo que no le gusta y controlar que eso que empieza a molestarle, no se dispare. 
Si alguna circunstancia ha provocado que la tortuga suba demasiado hacia arriba (peor estado emocional), nuestra pauta es parar por ambas partes (padres y alumna), de forma que pueda utilizar las estrategias que hemos trabajado para disminuir lo máximo posible la ira, en este caso, la técnica de la tortuga. Paramos un minuto, contraemos los músculos, respiramos tranquilamente y contamos hasta 10. Si lo necesitamos, podemos ir al baño y nos mojamos la cara. De esa manera, refrescarnos y caminar un poco también nos viene bien para desconectar de la situación. Podemos volver a retomar nuestras actividades cuando seamos capaces de volver a poner la tortuga en el estado de "bien, tranquila".

Es un trabajo lento, y hay que disponer sobretodo de mucha paciencia, pero hacerlo con la constancia que se requiere, evita muchísimos conflictos y poco a poco, el chico/a aprende a comunicar sus estados de ánimo con más facilidad y es más competente para regularse él mismo. Podrá darse cuenta de las consecuencias tan beneficiosas que se dan al controlar las rabietas y enfados, tanto para él mismo como para la relación con su familia.




miércoles, 4 de junio de 2014

¿QUÉ HACER DURANTE LAS VACACIONES?

ORIENTACIONES PARA ESTAS VACACIONES

Parece que fue ayer cuando comenzamos el curso, y de repente estamos en junio. Los meses corren y casi no te das cuenta que el aula se te escapa de las manos. Los niños están más contentos que nunca porque saben lo que se les avecina, y con tanto nerviosismo de excursiones, fiestas, notas y sol, las horas son fugaces. 
Muchos padres se preguntan qué pueden hacer durante estas vacaciones para evita,  a pesar de la desconexión total del cole, los chicos no pierdan las bases de lo aprendido. Normalmente se acude a las papelerías para comprar los cuadernillos de verano, que no dejan de ser lo mismo que tienen todo el curso (bajo mi modesta opinión). No quiero indicar que sea un material malo ni mucho menos, pero creo que si  abusamos del lápiz y papel, cuando lleguen a septiembre, volverán a encontrarse con lo mismo de siempre. 
Por eso yo propongo lo mismo que hacemos en clase, pero dándole un poco la vuelta, buscándole un sentido más atractivo y un trabajo más lúdico y espontáneo. Ahora que ya queda poquito para preparar las orientaciones a los papás, comparto mis ideas por si a algún profesor que esté leyendo esta entrada, le despierte sus propias ideas o quiera utilizar alguna que aparece por aquí. Igualmente para padres que están cansados de los mismos métodos y le apetezca probar otra cosa, algo nuevo.
Espero que os guste.

lunes, 2 de junio de 2014

UN MARCAPAGINAS CON ALGO MÁS

MARCAPÁGINAS ESPECIAL

Hoy vengo con otra de esas actividades que tanto me gustan. Aprovechar las actividades del día a día con el bienestar emocional, es compatibilizar lo curricular con lo humano, aprender y sentir. 
El día del libro se celebró el pasado mes de abril y como en tantos colegios, se realizan diferentes actividades. En nuestro cole se propuso hacer un marcapáginas. De forma muy sencilla, cogimos trozos de cartulina de colores, recortamos su forma y antes de plastificarlo....cada marcapáginas pasaba de mano en mano por todos los niños para que pudieran poner un mensaje positivo al dueño de tan valioso objeto. Así quedaron unos marcapáginas chulísimos, y siempre con el buen recuerdo cada vez que se utilizan, de todos los mensajes tan bonitos que te dejaron escritos. 

Esta idea me hizo llevarla a cabo también con mis chicos de por la tarde, ya que con algunos de ellos, trabajo en profundidad toda la parte emocional. 


Esa misma tarde fui a casa de una alumna para proponerla esta actividad, aunque con matices. En su caso, me interesaba que se esforzara por elaborar el marcapáginas, a su gusto, ya que es una niña con muy poca paciencia para las actividades manuales, pero que con ayuda y orientación al final cumple su objetivo. Por un lado, quería exponerla a esa situación que le hace sentirse nerviosa y estresada, para que con ayuda vea la gran capacidad que tiene de conseguir sus metas.

Como veis, el resultado fue formidable. Creó un bonito y pintoresco marcapáginas. Nos costó varios borradores y bastante tiempo, pero al final, sabiendo controlar esos pensamientos negativos que me llevan a equivocarme, y utilizar otros más positivos, podemos lograr lo que nos proponemos. 


Después de hacer el dibujo y colorearlo con tiempo (hay que disfrutar también de este momento una vez que hemos superado la parte más estresante), le pregunté si le gustaría que por la parte de atrás pudiera recibir comentarios positivos hacia ella (como los que se escribe en el "cofre de palabras mágicas"), solo que en este caso, las personas que ella eligiera. Le encantó la idea y nos pusimos manos a la obra. En este caso, decidió que la escribiera yo y sus padres, hecho que me dejo muy satisfecha. Si los padres se convierten en un reforzador importante para sus hijos, como es este caso, se ha ganado mucho terreno en casi todo.

Ahora cada vez que lee un cuento, también puede recordar todo lo que la quieren y las cosas buenas que puede dar. Ya veis que es muy sencillo de hacer y tiene un trasfondo importante, para cualquier persona.